Este proyecto Ciencia infinita, propone una serie de experimentos de carácter lúdico que desarrollen la creatividad e inicien a la gente menuda y a la gente joven en el método científico. Nos proponemos usar materiales domésticos y utilizar algunas claves de la educación informal como la divergencia y la autonomía en el aprendizaje.
No buscamos llenaros de contenidos, sino escuchar lo que ya sabéis, aprovecharlo y conocer métodos interesantes para discutir el conocimiento adquirido por vuestra propia experiencia en casa, o de vuestras investigaciones en Internet, o en los documentales televisivos.
Educar para la Ciencia es una de las fascinantes tareas de desarrollar las cualidades y capacidades de nuestras niñas y niños. Vivir en el siglo XXI nos obliga a tener gran formación y conocimientos en ciencia y tecnología. Nuestra sociedad, cada día más avanzada tecnológicamente, necesitará de ciudadanas y ciudadanos que hayan recibido una educación específica en estas materias. Aún en el caso en que no deseen llegar a ser físicas/os, químicas/os, ingenieras/os o informáticas/os, necesitan estas destrezas para moverse en la vida cotidiana. Ocurren en nuestro entorno, a diario, hechos científicamente descritos y tenemos un sinfín de oportunidades para invitar a nuestros peques a participar en el descubrimiento de las maravillas de las ciencias. Sin hacer uso de sofisticados equipos podemos acompañarles a entrar fácilmente en el mundo natural y alentarles a observar lo que sucede a nuestro alrededor. Cuando menos lo esperamos aparece un momento de magia y aprendizaje, por ejemplo, cuando algunas tazas flotan y otras se hunden mientras se friegan los platos; la electricidad estática que hace que el cabello se ponga de punta, etc. La observación metódica y cuidadosa de algunos hechos naturales es un paso sumamente importante para hallar explicaciones científicas.
Esta colección de divulgación científica, bajo licencia de Cultura Libre, contiene libros interactivos, con ida y vuelta entre el libro e Internet, rompiendo los límites del aula y de la enseñanza reglada para ayudar a la chavalería a preguntarse sobre el mundo y no dar por válida ninguna verdad inmutable. Incorporamos la ciencia como elemento lúdico en las relaciones entre el mundo-adulto y el mundo-infantil.
Lo que pretendemos con esta colección es COMUNICAR que aprender es divertido, que la Ciencia es divertida; provocar nuevas preguntas; crear entornos de aprendizaje y de comunicación de ese aprendizaje; superar los límites que supone una actividad de estas características en el uso doméstico; deslocalizar el aprendizaje de los contextos tradicionales favoreciendo la creación de entornos colaborativos; facilitar que las personas que realizan estos experimentos se conviertan en constructores de información; trasmitir que puedes llegar hasta donde desees, propiciando la interacción entre la persona que está utilizando el libro, quienes crean el contenido y la editorial.
– Con colaboradores de la talla de Marcos Pérez Maldonado (Director de la Casa de las Ciencias de A Coruña), Francisco Armesto (Técnico de la Casa de las Ciencias), Paco Franco del Amo, (Director de la Casa de los Peces de A Coruña), y Patricia Barciela (directora de la Domus de A Coruña), hemos arrancado con el primero «10 Experimentos con pelos». Perpetrado por este equipo de expertos divulgadores científicos, que intentan ser un estímulo para que chavalas y chavales de 12 a 16 años sigan los pasos de un método científico serio y conozcan la disciplina de la investigación científica. Creemos que es necesario que aprendan a pensar por su cuenta. Y para eso nada mejor que desarrollar un poco de espíritu científico: tienen que hacerse preguntas que les interesen, cuestionar esas cosas que son así «porque sí», aprender a tener método y rigor con los experimentos y criticar, incluso, las conclusiones a las que llegan.
– «10 Experimentos con cartas de poker. Informática desenchufada.» de Pablo Garáizar Sagarmínaga, profesor del Departamento de Telecomunicaciones en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Deusto e investigador en DeustoTech Learning y la Cátedra Telefónica – Deusto. En euskera «Informatika esperimentu»